Cocina proyectada en dos frentes, en estratificado roble color tabaco combinado con blanco. La encimera es en color blanco, de Krion®.

La combinación de colores madera y blanco es muy agradable, al igual que el tacto de los frentes de estratificado color tabaco, que se ha utilizado también para combinar en la trasera, donde la zona inferior es un copete alto de Krion curvado y la superior el mismo material de los frentes.

Se ha optado por distribuir la cocina en dos frentes en los que se ha situado por un lado la zona de fregadero y por otro la zona de cocción. El fregadero está realizado en el mismo material de la encimera con rebaje para el escurridor. El lavavajillas Miele está completamente integrado, al igual que el frigorífico, donde se ha jugado con la misma combinación de colores en los frentes.

En la zona de cocción, la campana Pando está integrada en el mueble, de manera que el cliente la extrae cuando quiera hacer uso de ella, y cuando no, queda perfectamente recogida, además es otro mueble que el usuario aprovecha para almacenamiento. Los muebles inferiores están equipados con cajones de extracción total para almacenamiento de todo tipo de utensilios, menaje, alimentos, etc.

En la parte alta de la cocina se ha querido llegar hasta el techo, optando por el color blanco para aportar mayor luminosidad y jugando con frentes idénticos en el ancho para aportar la mayor simetría posible.

Se ha optado en los laterales por costados hasta el suelo, que enmarcan mucho mejor los muebles, protegiéndolos con fundas de acero inoxidable de las humedades que puedan sufrir con la limpieza del suelo.

Blanco y madera, una combinación atemporal con infinidad de posibilidades.